Federica Montseny 1923
12/07/2019

El movimiento femenino internacional

Peces Històriques Triades Per Josep Maria Casasús[...]

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He dicho que la mujer entraba en un período de franca actuación y el movimiento internacional femenino corrobora mis palabras. En Inglaterra, en Alemania, en Bélgica, en América y hasta en Turquía e Indias, se ve una arrulladora acción femenina, de tendencia bastante avanzada. Y quizá es en Francia e Italia donde tiene mayoría el feminismo propiamente dicho. En España, la mujer obrera hállase en mejores condiciones morales que la de la clase media, sujeta a todos los prejuicios y sostenida en la más triste ignorancia. Sin embargo, a mi entender, esta actuación femenina, tanto en España como en el extranjero, si bien se desenvuelve en un sentido avanzado, es un poco incoherente, sin propósitos bien definidos ni idealidad determinada. En cierto modo, encuéntrase en idéntico caso que los demás factores de agitación social, pues en todos se nota esta extraña falta de firmeza ideológica, probablemente debida al trastorno general producido en los hombres y las ideas por la guerra y los acontecimientos sociales que conmueven al mundo. No obstante, estos vaivenes e indecisiones quitan energía e intensidad. Las quitan en todos los aspectos y son seguramente los causantes del confusionismo, el desequilibrio y la crisis de idealidades universal que nos ha llevado a una materialización perjudicialísima para el triunfo de los ideales y hasta para los mismos que los profesan. Pero eso que daña las grandes idealidades y a grandes masas, se agrava doblemente tratándose del movimiento femenino, que por su especial situación, que podemos llamar atraso evolutivo, ya que en realidad la mujer no va a la par de la evolución, necesita, sobre todo, esta intensa energía de que se halla ayuno. […] Por otra parte, se ha demostrado, de tantas maneras y con tantas pruebas, la imprescindible necesidad de que la mujer, como formadora de generaciones, se eleve moralmente a un lugar en consonancia con el progreso y su misión, reclamando sitio en la vida y templando su espíritu en las sacudidas sociales, preparándose así para la Humanidad futura. Se ve claramente la buena intención del movimiento femenino actual de cumplir el programa que durante tanto tiempo se le ha propagado, […] ¡La mujer se agita, la mujer despierta, la mujer, internacionalmente, se da cuenta de lo que ha sido y de lo que ha de ser! ¡Esperemos! ¡Confiemos! Pero, eso sí, no nos olvidemos nunca, mientras esperamos y confiamos, de repetir que hay una obra, una gran obra de reconstrucción social y de reivindicación humana y que en esta obra debemos poner todos nuestra voluntad y nuestras energías, buscando incesantemente en el hoy de nuestra juventud, la superación del ayer y la realización del mañana.